Muna
Posted by
Ya empezaban las vacaciones de verano y Roberto iba a tener un nuevo
amigo con el que jugar. Muna, una niña del Sahara venía a la casa de Roberto y
él, pensando que no le gustaría tener otro niño más en su casa, la recibió con
mal gusto. Días después la bañaron, la enseñaron a comer con tenedor y cuchara
y la llevaron al pediatra para vacunarla.
Pronto llegaría el cumpleaños de Roberto y le iban a regalar muchos
juegos. El día que llegó, vinieron muchos de sus amigos, su tía Naty y la
bisabuela Leo, aquel día fue fabuloso hasta que se apagó la luz debido a una
tormenta que produjo un corte eléctrico. Como no sabían qué hacer, Muna les
propuso algo. Hicieron figuritas con sus manos y con velas, contaron historias
y adivinanzas y cuando llegó la luz ni se enteraron.
Cuando se fueron sus amigos, la tía Naty y la madre de Roberto no les
dejaban dormir ni a él ni a Muna con tanto alboroto, parecían cacatúas.
Unos días más tarde, Roberto no podía creer que se estaba acabando ya el
verano. Su madre ya andaba comprando abrigos de invierno aunque sudaran la gota
gorda, a la “bisa” le dolían los huesos porque iba a cambiar el tiempo y la tía
Naty se iba de nuevo a Alemania.
Cuando llegó el momento en que Muna se iba todos estaban tristes y quedaron
en que por la noche mirarían al cielo y verían las estrellas desde aquí y desde
el Sahara porque el cielo es el mismo.
Sergio Miguel López. 5º Primaria
1 comentarios:
sergio que bien lo has hecho te mereces un premio novel,un oscar ...¡o lo que sea!Pero algo y rápido
Publicar un comentario